TRAVESĺA MARINA

 Hoy quiero navegar contigo

por los mares que tantas

veces hemos recorrido.

Navegar por ese mar tempestuoso

que arropa y agita con  fuerza

todo nuestro ser.

Llévame donde solo sienta la ola

que me arrastra a lo más profundo

del océano de tu pasión.

Hazme sentir el vendaval que estremece

nuestros cuerpos y nos arroja

a rumbos  desconocidos.

¡Oh mar tempestuoso! que

inundas con tus aguas lo que

encuentras a tu paso,

derribando las murallas que

aprisionan mi alma aventura.

¡Ven navega conmigo!

y luego de conquistar a 

Poseidón embravecido;

navegaremos hacia aguas tranquilas,

 llegaremos a la otra orilla 

donde descansaremos

de la gran travesía marina.

ODIO

¿Quién se atreve a nombrarte?

Te llevo conmigo en nombre de los sátrapas

que han sojuzgado la humanidad.

Los hipócritas te nombran para negarte.

Yo te nombro por los que han rasgado mis espaldas

y me enseñaron a odiar.

Tú que un día te adentraste en mi ser

Con el aguijón ponzoñoso de la ignominia.

Te miro de frente y no te temo.

Te encaro como un guerrero

Y juntos recorremos

los resquicios de la verdad.

Odio a aquellos que matan, que roban, que mienten

y a los que mancillan el honor.

Eres el báculo justiciero que hoy me ampara.

Solo Aquel fue capaz de perdonar, pero yo no.

Palabra es libertad

Palabra que fluyes a borbotones
en las mentes de seres marginados,
y despiertas por todos los rincones
la modorra de pueblos olvidados.

Tú, que pululas otras dimensiones
y traes alivio al desamparado,
dime: ¿Cuántas han de ser tus misiones
en este universo ya cansado?

Tú, que como las cuentas de un rosario
te deslizas en las manos esclavas
de este mísero pueblo tumulario.

¡Enardece y rebulle mis entrañas
para cantar el himno libertario,
y que retumbe el trueno en las montañas!


Alice J. Vargas